viernes, 28 de diciembre de 2012

Hijos de las metáforas. Tatiana Oroño

Hijos de las metáforas 

           las ideas 

no se matan un fantasma 

recorre Europa toda Dinamarca
es una cárcel
hay algo entre la tierra y el cielo que no había soñado

tu filosofía 

no nos bañamos dos veces en el mismo río 

todo lo sólido se disuelve en el aire
en el
tren 

del  

progreso
(una laguna
lúgubre
             de monedas de plata) 

el tiempo es
oro dadme 

un ordenador
y os daré la globalización 

navigare necesse 

dadme mi caballo 

Descendientes de
imágenes:
el que no tiene
nada  

lo tiene todo sólo sé
que no sé nada no tenéis  

para perder más que
las cadenas la poesía  

no se vende
porque no 

se vende la poesía tiene como fin la verdad
práctica  

la poesía es del que la necesita 

la poesía debe ser hecha por todos el paisaje
es 

un estado de alma el pueblo 

unido / jamás será vencido / quedará en la leyenda /
esta guerra este volcán / los días de balachaiev / los soldados del soviet  / los días
de balachaiev / los soldados
del soviet /  

Cuando despertó el elefante todavía estaba allí. 

Tatiana Oroño (San José, Uruguay, 1947). Entre sus obras: El alfabeto verde, 1979 y Tout fut ce qui ne fut pas, 2004

sábado, 22 de diciembre de 2012

Anacreonte. Julio Cortázar

Anacreonte
 
Eternamente joven y distante
corazón mío, estrella desasida,
casi sin ti se va de mí la vida
con su gesto y su túnica danzante.
 

De pie en el albo templo, coribante
ebrio de soledad y despedida,
me alcanzas esta hiedra entretejida
con la sutil divisa del instante.
 

Vana corona, vana permanencia
en tanto amor que es ya el amor postrero
y el sabor de la sal bajo las rosas;
 

delante vas, figura de tu ausencia,
oh corazón, halcón sin halconero,
y en el mañana y el ayer te posas.
 

Julio Cortázar (1914 -1984), novelista y cuentista argentino. Su mejor novela, Rayuela, 1963


martes, 4 de diciembre de 2012

Nos hemos extraviado en este mundo. Maximilián Voloshin

Nos hemos extraviado en este mundo


La oscuridad nos acompaña.

Somos como niños que se abrazan

Tímidamente en el abismo.


Chapoteos viajan por ríos tristes;

Orfeo busca la sombra amada.

Alguien nos unió el uno al otro

Y alguien de nuevo nos separa…


Dolor inerme. Gritos sordos.

La mano arde aún en la mano.

Y la roca húmeda en la mano.

Y la roca hundida en la lejanía

Balbucea un nombre: Eurídice.


Maximilián Voloshin (Kíev, 1877 – 1932), poeta ruso, considerado uno de los principales exponentes de la Edad de Plata de la cultura y la literatura rusas

Traducción del poema: Jorge Bustamante García

viernes, 30 de noviembre de 2012

Anteo. Seamus Heaney

Anteo


CUANDO yazgo en el suelo

Encendido me yergo cual rosa en la mañana.

Siempre me tiro a tierra en las peleas

Para frotarme con la arena



Y eso funciona

Como elixir. No puedo destetarme

Del extenso contorno de la tierra, sus venas-ríos.

Aquí abajo en mi cueva



Ceñido por la roca y la raíz

Me acuno en las tinieblas que me engendran

Y me nutro por todas las arterias

Lo mismo que un montículo.



Que cada nuevo héroe venga

En busca de manzanas doradas y del Atlas.

Luchar debe conmigo antes de penetrar

En este reino de la fama



Entre los celestiales y los de sangre real:

Puede arrojarme y renovar mi nacimiento

Pero que no se salga con su plan de levantarme en vilo de la tierra,

Mi elevación,mi caída.


Seamus Heaney (Condado de Derry, Irlanda del Norte, 1939) es un escritor y académico irlandés. Recibió el Premio Nobel de Literatura en 1995

domingo, 18 de noviembre de 2012

Pater Aeolus. Jesús Aller

Pater Aeolus



El viento trae memoria de tiempos olvidados,

de mundos extinguidos que latentes aguardan;

es el fiel mensajero de un retorno infinito

que entremezcla las hojas del jardín otoñal.



Él, que agita las tierras y conmueve los mares,

y se goza en destruir, huracán despiadado,

sabe también ser brisa que murmura risueña

y con su dulce beso consuela nuestras cuitas.



El viento es lo que fue que regresa implacable;

letal o sanadora, su energía es oscura.

Somos nuestros recuerdos y para darnos forma

el viento, que es tenaz, repite su mensaje.



Jesús Aller (Gijón, 1956). Escritor español. Entre sus obras: Pájaro sobre el mar, 1980, Non serviam, 1987 y Los dioses y los hombres, 2012

jueves, 15 de noviembre de 2012

Epopeya de Edipo de Tebas. Les Luthiers


Epopeya de Edipo de Tebas

De Edipo de Tebas,
haciendo memoria,
os cuento la historia
con penas y glorias,
de Edipo de Tebas.

Le dijo el Oráculo,
"Edipo, tu vida
se pone movida,
serás parricida",
le dijo el Oráculo. 

Seguía diciendo:
"Si bien yo detesto
hablarte de esto,
se viene, se viene un incesto",
seguía diciendo. 

Sabiendo tal cosa
su padre el rey Layo,
veloz como un rayo,
le dijo a un lacayo,
sabiendo tal cosa. 

"Te irás con mi hijo,
no quiero que crezca,
haz tú que perezca
como te parezca,
te irás con mi hijo." 

Cumplida la orden,
el muy desdichado
con los pies atados
quedóse, quedóse colgado,
cumplida la orden. 

Edipo salvóse
y a Layo matólo,
peleándolo él sólo
al cielo enviólo,
Edipo salvóse. 

Semanas más tarde
a Tebas avanza,
resolver alcanza
cierta adivinanza,
 semanas más tarde. 

 La Esfinge de Tebas
 al ser derrotada
 se ofusca, se enfada
 y se hace, y se hace pomada,
 la Esfinge de Tebas. 

 Y sin darse cuenta

 casado él está

 con quien saben ya,
 su propia mamá,
 y sin darse cuenta. 

 De sus propios hijos
 hay grandes secuelas
 y, aunque esto le duela,
 Yocasta es abuela
 de sus propios hijos. 

 Edipo al saberlo
 en una entrevista
 con su analista
 se quita, se quita la vista,
 Edipo al saberlo. 

Moraleja:
Al ver a una esfinge
planteando un dilema,
huid del problema
cambiando de tema,
al ver a una esfinge. 

Madres amantes,
tomad precausiones
por las efusiones
de hijos varones,
madres amantes. 

Por no repetir
la historia nefasta
 de Edipo y Yocasta,
 lo dicho, lo dicho ya basta,
 por no repetir.
 
Les Luthiers. Grupo argentino de música humorística.

 

miércoles, 7 de noviembre de 2012

La musa rebelde. Cristina Peri Rossi


La musa rebelde
 
Hoy la musa ha amanecido reivindicativa
No sé qué me dice de su verdadera personalidad
de ser ella misma
de no querer ser otra
La musa está cansada
cuatro años en el escenario
han mermado su resistencia
Basta de disfraces
quiere ser auténtica
Le abro la ventana de los sueños
para que se vaya
Presiento que ha llegado el momento
de decir adiós
Ella se irá por la ventana
y en el suelo
como un vestido ajado
ya sin uso
la musa será sólo vacío
sólo ceniza
La habitación estará muy sola
y yo no tendré un cuerpo
al que vestir
ni un poema que escribir. 

Cristina Peri Rossi (Montevideo, 12 de noviembre de 1941) poeta, narradora, traductora y ensayista uruguaya. Entre sus obras: Evohé, 1971 y Las musas inquietantes, 1999.

lunes, 29 de octubre de 2012

Helena. Joan Margarit

Helena


El ayer es tu infierno, es cada instante

en el que, sin saberlo, te has perdido

y cada instante en el que te has salvado.

Cuando el joven que fuiste está muy lejos,

amar es la venganza del pasado.

Viene desde una guerra donde fuiste vencido,

de armas y campamentos que un día abandonaste

en la Troya que llevas en ti mismo.

Te buscarán de noche los aqueos

y estrecharán el cerco. Volverás,

por alguna mujer, a perder la ciudad.

Helena es estos sueños

de los cuales la vida fue apropiándose.

Defiéndela otra vez: será la última.

Y hazlo con valentía, desarmado.


Joan Margarit (Sanahuja, Lérida, 11 de mayo de 1938). Poeta, arquitecto y catedrático. Entre sus obras: Cantos para la coral de un hombre solo, 1963 e Intemperie, 2010

sábado, 27 de octubre de 2012

Lamentación de Ariadna. Claribel Alegría

 
Lamentación de Ariadna
 
No te pierdas, Teseo
vuelve a mí.
La playa está desierta
tengo los pies sangrientos
de correr en tu busca
¿será que me engañaste
dejándome dormida en esta isla?
Perdóname, Teseo
¿Recuerdas nuestro encuentro?
amor eterno me juraste
y yo te di el ovillo
y volviste a la luz
después de haber destruido
al minotauro.
¿Te secuestró algún dios
sintiéndose celoso?
No me inspiran temor
ni Poseidón
ni Zeus
es de fuego mi ira
y se alzará
desde estas aguas
hasta el cielo.
Vuelve,
vuelve, Teseo
no te pierdas
en los laberintos
de la muerte
anda suelto
el ovillo de mi amor
atrápalo, Teseo
vuelve a mí
soy tu tierra
tu luna
tu destino.
Clava en mí tus raíces. 
Claribel Alegría (Estelí, Nicaragua, 1924). Escritora de origen nicaragüense. Es poeta, narradora, ensayista y traductora. Entre sus obras: Anillo de silencio, 1945 y Otredad, 2011

lunes, 15 de octubre de 2012

CABEZA DE MEDUSA. Justo Jorge Padrón


CABEZA DE MEDUSA

En la cueva del odio la presiento
con su brío colérico y retráctil.
Se tensa entre los aires mirando el precipicio.
Su energía es eléctrica y lívida la sombra.
Desencaja facciones con un delirio abrupto.
En sus ojos resurge el vendaval,
la hoguera avariciosa que destruye.
Jamás podría verse en sus pupilas,
por eso no soporta los espejos,
ni el agua remansada de la alberca.
Cuando remonta arrasa cuanto cierne.
Es el grito del caos, la violencia estallante.
Maligna, aunque la invoquen como la santa ira,
pervive en nuestra historia desde el albor del hombre,
como un arma dispuesta y a su alcance.
 
Justo Jorge Padrón (Las Palmas de Gran Canaria, 1943), poeta, ensayista y traductor. Entre sus obras: El bosque de Nemi  y El latido del mundo.


miércoles, 10 de octubre de 2012

Una sociedad de idiotas o las Humanidades en la LOMCE



Una sociedad de idiotas o las Humanidades en la LOMCE

Los antiguos griegos denominaban idiotas (de la misma raíz que idios: particular, propio de cada uno) a las personas que solo se preocupaban por sus asuntos particulares, su vida privada, sus asuntos personales. Lo contraponían a “politikón” (lo social, lo político), que lo aplicaban a quienes estaban interesados en las cuestiones públicas y el bien común. En aquella sociedad “democrática” (con todos sus defectos, pues ya sabemos que ni las mujeres ni los esclavos disfrutaban de los derechos de ciudadanía), quienes trabajaban por el bienestar y la prosperidad de su comunidad eran mejor valorados que aquellos que miraban solo por sus propios negocios. Finalmente, la palabra “idiota” acabó derivando en insulto.

Con la irrupción del sistema capitalista la cosa cambió. Se consideraron como modelos que había que imitar a los burgueses que se enriquecían poniendo todo su esfuerzo personal en acrecentar su riqueza desentendiéndose de la cosa pública. La coronación de este proceso fue el triunfo ideológico de la burguesía al imponer a toda la sociedad su propia escala de valores, que rezaba así: el enriquecimiento de los individuos contribuye a la riqueza de las naciones y al bienestar común. Hoy en día la falacia del modelo neoliberal se ha implantado definitivamente.

La nueva ley de educación (LOMCE) del ministro Wert es un reflejo de esta ideología neoliberal. La educación deja de ser una finalidad en sí misma, para convertirse en “ancilla oeconomiae”, es decir, en “sirvienta de la economía”. El objetivo de la enseñanza ya no va a ser educar integralmente a las personas para que se conviertan en sujetos autónomos, responsables y solidarios, sino en crear mano de obra barata al servicio de un modelo económico que a todas luces ha resultado injusto, insolidario y depredador para con las personas y el propio planeta. El papel al que se reduce a las Humanidades en el nuevo proyecto de ley es solo una pequeña prueba de todo esto, entre las muchas que se podrían aportar.

En la así llamada, con ironía sangrante, Ley para la Mejora de la Calidad Educativa, el estudio de las Humanidades, que educa en los seres humanos lo que les define como tales seres humanos, es decir, la propia razón, queda definitivamente postergado en beneficio de otras materias instrumentales. No importa ya educar seres pensantes, críticos y autónomos, sino “instrumentos de producción”, seres con unos conocimientos mínimos que estén dispuestos a trabajar con dureza y resignación y que no se planteen la justicia o la injusticia de su situación vital o la posibilidad de transformarla.

Así, en la LOMCE, la situación de las Humanidades queda mortalmente dañada. La Cultura Clásica desaparece de 3º y 4º ESO, ni siquiera aparece nombrada en toda la ley. El Latín se dará en el curso preparatorio de Bachillerato (4º ESO) solo para el alumnado que vaya por la rama de Humanidades y Ciencias Sociales. En 1º y 2ª de Bachillerato se impartirá Latín como materia específica de la modalidad de Humanidades, mientras el Griego queda relegado a la condición de materia optativa de oferta no obligada, lo que supone su práctica desaparición. 

Sospechando las razones profundas que les han llevado a ello, solo cabe denunciar que quienes han diseñado el anteproyecto de la LOMCE, imbuidos de las ideas neoliberales rampantes y pensando, como siempre, a corto plazo, lo que desean sin rubor es una sociedad de idiotas, personas sometidas a un sistema económico degradante, que no piensen, que no critiquen, que se callen, que asuman su situación de inferioridad y que no sueñen en cambiarla, mientras que los que están arriba se siguen enriqueciendo tranquilamente y sin oposición. Y si algún rato les da por pensar que solo sea en sus propios intereses y nunca en el bien común. 

Porque las así llamadas autoridades educativas seguramente saben que una de las palancas que abrió las puertas de la Bastilla y posibilitó el triunfo de la Revolución fue el estudio de las Humanidades que los enciclopedistas franceses llevaron a cabo y les hizo abrir los ojos a las injusticias del Antiguo Régimen, cuando las comparaban con los aires “democráticos” que respiraron los ciudadanos de la antigua Grecia y de la República romana. 

¡No seamos idiotas!

Conrado Santamaría

jueves, 4 de octubre de 2012

Una lección de historia. Carlos Álvarez

Una lección de historia



Dicen que el año mil novecientos treinta y tantos

la tierra de mi patria dejó de ser de tierra,

porque se convirtió en un suelo estéril

enemigo del trigo y de la lluvia;

que los ríos perdieron temblor y transparencia,

y supieron la forma concreta de la muerte;

que las noches no fueron compañeras del viento,

y los robles doblaron su medrosa estatura

temerosos de una bala perdida...

(mejor se entierra el plomo tras el pecho de un árbol

que entre las jóvenes ramas del hombre,

y mejor todavía

en la corteza muda de la tierra, en las minas...).

También dicen que en tiempos muy lejanos,

siglos y siglos antes del sputnik primero,

pero siglos más tarde

de que el hombre lograra que el sudor de otro hombre

llegara hasta sus manos con el brillo del oro,

también dicen que entonces

los ríos se secaron y el aire se hizo espeso

alguna vez en Gilboé y en Hiksos,

y en la llanura encrespada

de Maratón, bajo el cielo de Grecia.

No sé, yo no recuerdo.

Ni me teñí las manos con sangre filistea,

ni me importaron nada la ambición de Alejandro

ni la sed insaciable de Darío...

y del duelo entre Oriente y Occidente

_ese duelo pendiente todavía

según dice la prensa_,

del duelo entre Persépolis y Atenas,

ya sólo me interesa la hazaña del atleta

que corrió sin descanso

desde la última herida de lanza

hasta el canto primero del pueblo alborozado.

Son cosas ya pasadas:

historias de otros tiempos y otros hombres:

de los hombres que lucharon en Troya

o que sintieron miedo en las trincheras

unos minutos antes del combate en el Ebro...

Yo no sé de esas cosas:

yo soy un hombre que ha nacido más tarde,

alejado en el tiempo de Brunete y Guernika;

alejado del odio por amor a la tierra...

amigo de la tierra y enemigo del odio.



Carlos Álvarez (Jerez de la Frontera, 1933). Entre sus obras: Los poemas del bardo, 1977, Tercera mitad, 2007

viernes, 28 de septiembre de 2012

Héroes. Jorge Riechmann

Héroes


Álvaro Pombo declara
que su héroe no es Narciso
sino Prometeo. 

A estas alturas francamente
yo no confiaría
en ninguno de los dos gañanes 

ni en combinación transgénica ninguna
-Narciteo, Prometiso- 

y sugiero más bien
volver la vista hacia la paciente Penélope: 

las artes del bordado desbordando
a los regüeldos de testosterona 

Retejer lo destejido
reparar lo que se deshilachó
recuperar el mantel o el cobertor
(la cobija, dirían en México: eso que nos cobija)
a partir de los andrajos: 

aquí sí que podríamos hablar
de verdad de heroísmo 

el que de veras importa
el cotidiano. 

Jorge Riechmann (Madrid, 1962). El común de los mortales. Tusquets, 2011

viernes, 21 de septiembre de 2012

Reaparición de lo heroico. José Ángel Valente

La flor de los pretendientes y las buenas familias
en los salones espaciosos.
Y ya la guerra de Troya terminada
de tiempo atrás. Los hombres que allí fueron,
los sonoros navíos, el caballo mortífero,
vagas patrañas de la ideología.

Cómo puede esperar Penelopea.
Quien tenga una esperanza ocúltela,
pues el tiempo es de tibia descreencia
bien templada para la ocasión,
y la palabra más pura en los salones
sin tanta servidumbre a lo pasado.

Reunámonos, pues, para cruzar apuestas
sobre el futuro que nosotros somos
y olvidemos el arco, el duro arco del rey,
aquel objeto pesado y anacrónico
que la sentimental Penelopea
aún tiene por sagrado.

Así habló
y así se alzó entre todos Antínoo,
flor de los pretendientes y las buenas familias,
joven experto en lenguas extranjeras,
hábil en la ironía y el pastiche.

Rió la concurrencia con dulzura
y se sintieron más en el meollo
del capital asunto
todos los pretendientes de provincias.

Pero ya el harapiento vagabundo,
el huésped no aceptado,
impuesto por el hijo de la reina,
acariciaba el arco.
Así templó la resistencia
de la tenaz materia.
Tocó la flecha amarga,
hizo vibrar la cuerda poderosa
con un rumor distinto
y un tiempo antiguo vino en oleadas
de hosca respiración hasta los hombres.

Tomó Antínoo una copa entre sus manos
y alzóla en medio del festín.

Estaba tenso el arco.
Un dios de torva faz medía los segundos.
La saeta partió veloz,
certera. Atravesó su punta
la garganta de Antínoo y salió por la nuca.
Un chorro espeso
de irreparable sangre vino
a las fauces del muerto.

Flor de los pretendientes,
irrisorio despojo,
entre el vaho animal de la hermosa matanza.


José Ángel Valente (Orense, 1929 – Ginebra, 2000). Poeta, ensayista y traductor gallego. Entre sus obras: A modo de esperanza, 1954, Punto cero, 1972 y Fragmentos de un libro futuro, 2000.

sábado, 8 de septiembre de 2012

Dafne. Beatriz Vignoli


Dafne

a Hugo Padeletti


Ser verde en el invierno,
ser brisa y ser azul,
deprisa:
que padre río me transforme en árbol.

Debo espejar lo eterno en el instante
del brillo,
ser la cava del grillo:
que padre río me transforme en árbol.

Entre las hojas el trueno al sol murmura;
yo huyo en la espesura.

No quiero ser la cosa
que un dios rapta y destroza
y durar como resto:
dadme al pesto.

Que padre río me transforme en árbol.

Sólo existir apenas,
floral, obscena sombra de la gloria
en una vana frente. No la afrenta
de Apolo.

Prefiero vegetar, vegetalmente.
Que sea sueño toda mi memoria.

Beatriz Vignoli (Rosario, 1965). Poeta, novelista y crítica argentina. Entre sus obras: Blues de la erosión, 1980 e Ítaca, 2004.

jueves, 23 de agosto de 2012

Latín y jazz. Gonzalo Rojas


Latín y jazz

Leo en un mismo aire a mi Catulo y oigo a Louis Armstrong, lo reoigo
en la improvisación del cielo, vuelan los ángeles
en el latín augusto de Roma con las trompetas libérrimas, lentísimas,
en un acorde ya sin tiempo, en un zumbido
de arterias y de pétalos para irme en el torrente con las olas
que salen de esta silla, de esta mesa de tabla, de esta materia
que somos yo y mi cuerpo en el minuto de este azar
en que amarro la ventolera de estas sílabas.

Es el parto, lo abierto de lo sonoro, el resplandor
del movimiento, loco el círculo de los sentidos, lo súbito
de este aroma áspero a sangre de sacrificio: Roma
y África, la opulencia y el látigo, la fascinación
del ocio y el golpe amargo de los remos, el frenesí
y el infortunio de los imperios, vaticinio
o estertor: éste es el jazz,
el éxtasis
antes del derrumbe, Armstrong; éste es el éxtasis,
Catulo mío,
¡Tánatos!

Gonzalo Rojas (1916-2011). Poeta chileno. Entre sus obras: La miseria del hombre, 1948, Diáologo con Ovidio, 1999 y Con arrimo y sin arrimo, 2010

domingo, 19 de agosto de 2012

El Jardín Botánico. Batania

El Jardín Botánico

Entre el gris de los geranios y un trébol de jilgueros,
en la línea recta que va de Lauros a Basauri,
bajo robles y encinas, perales y manzanos
que no siempre están en flor,
llegó el amor de Iratxe y su boca sin calendario.
Nada más corriente mi historia,
pero como ya era un proyecto de poeta,
quise poner en verso
la amplitud de mis sentimientos,
y leídas en las grandes páginas de la poesía universal
las palabras excelsas que se deben escribir,
pronto me olvidé de esos nombres,
pues me parecían
demasiado simples,
demasiado pobres,
demasiado claros,
y halladas en los libros las palabras
(nunca sabidas por mí hasta entonces)
de rododendro, meliloto y aladierno,
los pájaros
(que nunca había visto)
como la oropéndola o el aguanieves,
lugares
(a los que nunca he ido)
como Tracia, Arcadia y Antioquía,
nombres de mujer
(ya olvidados)
como Tisbe, Perséfone o Deyanira,
elegí éstos para referirme a aquéllos,
y en lugar de escribir, por ejemplo,

Iratxe camina entre los ciruelos de Lauros...

escribía:

Deyanira vaga entre los rododendros de Antioquía...,

sin saber qué mujer pudiera ser Deyanira
(nunca conocí ninguna)
qué planta, árbol o arbusto sea un rododendro
(pero es tan bella, la palabra)
qué lugar Antioquía
(sonoro, refulgente, señero).
Pero un día,
paseando por El Prado,
me dio por entrar
en el Jardín Botánico,
y cuando vi lo que realmente era
un aladierno,
lo que realmente era
un rododendro,
lo que realmente era
un meliloto,
quedé muy confundido:
no, la realidad no confirmaba
la belleza de sus nombres.

Desde entonces,
ay, desde entonces.
Ya no quiero Deyaniras sino Iratxes.
No quiero oropéndolas sino jilgueros.
Ya no quiero rododendros
sino los manzanos de Lauros,
aunque no siempre estén en flor.

 Batania (Lauros, 1974), poeta neorrabioso

lunes, 13 de agosto de 2012

Latrodectus mactans. Sandra Toro

Latrodectus Mactans


Pinzar el extremo del hilo
con la garra.
Y tirar.

Así desmadejamos,
Penélope,
noche a noche
el camino a Ítaca.

Así vos
yo
nacidas de la misma
casta: tejedoras,
embaucamos al tiempo.

Arañas
de vientre condenado
donde a fuego la marca
del reloj.

Seda vertida
del sexo mudo
para trazar
(mandala
o laberinto)
el lecho nupcial
que nos abrace al consorte.

Túmulo
de ese eterno retorno.

Sandra Toro (Buenos Aires, 1968). Poeta y traductora argentina.


miércoles, 8 de agosto de 2012

Sal de la ciudad, abandona Ítaca. Ánjel María Fernández


Sal de la ciudad, abandona Ítaca
transitando mercados,
atracando en los puertos.

Consume comunes productos típicos
en cada plaza visitada,
huele a las gentes, conoce sus flores.

Desnuda el alma de Lestrigones
y Cíclopes,
desnuda del airado Poseidón
pide que tu camino sea largo.

Y cuando ahíto regreses a Ítaca
tus vecinos seguirán viendo en ti
al mismo mentecato de siempre.



Ánjel María Fernández (Arnedo, 1973). Entre sus obras: Pájaro en llamas.

domingo, 5 de agosto de 2012

El mito del perro griego amotinado. Daniel Macías




El mito del perro griego amotinado 

A Kanellos, Loukanikos y sus amigos.


Está ladrando fuerte el perro del color de la canela:-¿Quién debe qué? ¿Quién debe a quién?- Frente a la policía, junto a los amotinados, salta y juguetea entre gases de lágrimas, piedras y palmeras de fuego. Ahora están ardiendo los hombres con más brillo que el archipiélago de Holdërlin, porque los prudentes atenienses no pueden decidir nada en la asamblea de la plaza sin consultar a los mercaderes y sus criados.
¡Cuánto hacía que el dios del vino no se escapaba para burlar y enloquecer al rey Penteo!
Ladra, aunque sea con aromas de canela, ladra...

Daniel Macías (Moguer, 1965). Entre sus obras: El imperio sobre nada, 2000, Las aventuras de Imperio Sevilla, 2007 y Neuroguerrilla, 2012

jueves, 2 de agosto de 2012

Lucrecia. Alberto Gil-Albert


Lucrecia

Yo puedo extinguirlo todo
y entregándome a la muerte
señalar el fin.
Tal es el crimen
comparable al llanto
como una huella enorme
pétrea e incólume.

Supliqué con la piedad de la víctima
rogué por mi pervivencia
quise mis pechos indemnes
plenos de tiempo futuro
mis brazos estremecidos clamaron
por una lágrima por auxilio
pero todo grito fue vano.
Mi túmulo ensangrentado
no fue a Roma
ni elevado fue entre las plañideras
para venganza del criminal.
Tarquino fue la sombra de mi nombre
el choque de los escudos sobre la tierra.
¿Quién ahora dirá mi oración
clamará la venganza de los odiosos muslos violentados?
Toda la ciudad arrebatará al rey su trono
y mi muerte no será ya
el origen de una bondadosa República.

Alberto Gil-Albert (Logroño, 1960), abogado y poeta. Entre sus libros, Inmulieribus, 2012

lunes, 16 de julio de 2012

Los seres intocables. Enrique Falcón

Los seres intocables

– para Miguel Morata, librero de la Primado,
pulmón de resistencias en la ciudad de Valencia.


Jorge Semprún leía a Paul Valèry en el campo de concentración de
Buchenwald

(y era en las letrinas
donde él y sus compañeros recitaban
también a Heine, juntos a coro,
cuando en los domingos santos de las letrinas
los hombres eran siempre menos vigilados)

En el mayor campo de concentración para mujeres en territorio
alemán, Vlasta Kladivova recopilaba poemas y poemas

(que su amiga Vera ilustraba,
antes de guardarlos bajo su litera,
con tinta de colores sustraída
de los barracones de los oficiales)

En el campo Uno de Gusen, entre descanso y descanso, el poeta
Jean Cayrol escribía su Canto a la esperanza sobre una tabla de
madera a modo de mesa

(lázaro
recuperado a la vida
por la acción de Johann Gruber, aquel sacerdote
con identificación 43.050
que sería después torturado,
durante tres días seguidos,
antes de morir en manos de las SS)

Primo Levi recitaba el Canto de Ulises según Dante, acompañando
a su amigo en la fila de sopa

(y Jean Samuel
se preguntaba por qué en el Lager de Auschwitz
había irrumpido
–precisamente–
aquel pasaje del Inferno)

Jozef Czapski impartía conferencias sobre Proust en los refectorios
del campo de prisioneros de Griazowietz

(esas horas felices
que, según él,
aliviaban la herida colectiva
tras la matanza en el bosque de Katyn)

En los diversos kommandos asociados al campo de Mauthausen, el
catalán Joaquim Amat escribía sus poemas en papel de sacos
de cemento

(él los escondía,
durante largas temporadas,
en los almacenes
y también bajo sus ropas)

Tatiana Gnedich repasaba de cabeza, en la oscuridad del presidio,
aquellos miles de versos de Byron, que ella se sabía de memoria

(su carcelero quedó conmovido
tras escucharla recitar esos poemas vertidos al ruso,
y retrasó en dos años su traslado
a un gulag de Siberia,
donde habría de pasar 124 meses
perfeccionando aún más,
y siempre de cabeza,
su traducción del Don Juan,
texto que dictaría –una vez libre–
después de haberse quedado
literalmente ciega).

Tengámoslo presente (nosotros,
que aún no escribimos en un campo de concentración):

En las letrinas
En las literas
En las mesas de tabla
En las paradas de sopa
En los comedores
En los sacos sustraídos de los almacenes
En la garita desde donde te aguarda
la impaciencia de los vigilantes:
seres intocables, palabras y versos.

Enrique Falcón (Valencia, 1968), poeta adscrito a prácticas literarias críticas y socialmente comprometidas (poesía de la conciencia, escritura del conflicto, literatura activista) en el panorama actual de la poesía española. Entre sus obras: Amonal y otros poemas, Taberna roja y La marcha de 150.000.000


jueves, 24 de mayo de 2012

VOLARE AUDE. Miguel Ángel Rivero Gómez

VOLARE AUDE

A Oscar Wilde


Ven,
atrévete a volar.
Aprenderemos juntos
la cartografía del aire.
Atravesaremos
confines y murallas.
Seremos eternos migrantes,
esclavos del tiempo subjetivo,
guías perdidos en la montaña,
brújulas desorientadas.

Ven.
Hagamos que el deseo
quiebre las cadenas,
deshilvane el miedo.

Ven.
También yo
tengo las alas intactas.

Miguel Ángel Rivero Gómez

viernes, 18 de mayo de 2012

Galatea. Amalia Bautista

Galatea

No sabía qué hacer aquella tarde.
Tú estabas enfadado y no querías
salir. Me fui al Parque del Oeste
y estuve paseando mucho rato
sin encontrar un alma. En el invierno
casi nadie pasea por los parques.
No pensé nada. Me senté en un banco
y encendí un cigarrillo. De repente
un hombre joven se sentó a mi lado.
Le miré y vi que había un solo ojo
en mitad de su frente, un ojo oscuro,
tristísimo y brillante. Me miraba
como pidiendo ayuda, suplicando.
Ninguno de los dos dijimos nada.
Él miraba mis ojos y yo el suyo.
En silencio empezó a llorar despacio,
se avergonzó y se fue. Yo no hice nada
por detenerle. Tú no te creíste
ni una palabra de esta historia, pero
yo me lleno de angustia y de tristeza,
aunque quiera evitarlo, si recuerdo.

Amalia Bautista (Madrid, 1962). Poeta española. Ha publicado: Cárcel de amor, La mujer de Lot y otros poemas, La casa de la niebla.

domingo, 13 de mayo de 2012

Nike cuando vacila. Zbigniew Herbert

Nike cuando vacila

Nike más bella en el instante
en que vacila
la diestra bella como una orden
descansa en el aire
mas las alas vibran

ha pues divisado
a un joven solitario
sigue el largo surco
de un carro de combate
por un gris camino en un gris paraje
de rocas y ralos matojos de enebro

aquel joven morirá pronto
de hecho el platillo de la balanza con su destino
ya está cayendo violentamente
hacia la tierra

Nike desea
acercarse
y besarle la frente

mas teme
que él que aún no conoció
la dulzura de las caricias
al sentirla ahora
podría huir como los otros
hicieron durante la batalla
así que Nike vacila

y al final decide
quedarse en esa postura
que le enseñaron los escultores
avergonzada de aquel instante de ternura

sabe bien
que mañana al alba
encontrarán a ese muchacho
con el pecho abierto
los ojos cerrados
y el amargo óbolo de la patria
bajo su lengua entumecida.

Zbigniew Herbert (1924 – 1998) poeta y dramaturgo polaco. Entre sus obras: Mister Cógito, 1974, Informe sobre la ciudad sitiada, 1990.

domingo, 6 de mayo de 2012

Habla Sosos de Pérgamo sobre Parsons, Spies, Fischer y Engel. David Franco Monthiel

Habla Sosos de Pérgamo sobre Parsons, Spies, Fischer y Engel
En mitad del camino había una piedra
Carlos Drummond de Andrade

Apenas queda un puñado de teselas.

Hay quienes las arrojan
al río del tiempo
y quienes se apedrean
en la oscuridad.

Hay quienes las siembran
en las murallas
y quienes siempre tropiezan
con ellas
en el atajo de baldosas.

Algunos las miramos.

Y las apretamos en la mano.



David Franco Monthiel (Cádiz, 1976). Escritor. Forma parte del colectivo de expresión y agitación cultural La Palabra Itinerante. Renta básica de olvido, 2004, Las cenizas de Salvochea, 2008

CONDESCENDENCIA. Enrique Gracia Trinidad

  CONDESCENDENCIA   El Nudo Gordiano no quiso desilusionar a Alejandro, pero ya estaba a punto de soltarse él solo.   Enrique Grac...